En la década de los cincuentas, el poblado de Puerto Nuevo habia empezado a ofrecer su pesca a los turistas de paso.

Una fusión que se volvió popular por desafiar las lujosas preparaciones tradicionales de todo el mundo de la langosta.

Susana Plasencia es recordada como una de las autoras quien cocinaba la langosta sin pretensiones de exuberancia, pero con todo el respeto a su sabor. Simplemente con los ingredientes que tenía a la mano.

Hasta hoy, la casa de la Langosta en Puerto Nuevo, sigue ofreciendo no solo la tradicional receta original de la langosta Puerto Nuevo, sino tambien una variedad de platillos, mixología y vinos de la región.

Puerto Nuevo, en el municipio de Rosarito, Baja California, una pequeña villa de pescadores, que ahora posee mas de 40 opciones de restaurantes sirviendo a los viajeros su tradicional langosta.

 

Si es puerto nuevo, es más que la fama de la Langosta. Es fusión de culturas de la región.

 

De camino a Ensenada o al Valle de Guadalupe.

Después de disfrutar de su langosta es una buena idea visitar el parque de aventura Desert Nest. El parque posee cinco tirolesas que cruzan el desierto, la más grande con un kilómetro de largo.

A la mitad del camino hay un puente colgante y, desde donde los más atrevidos hacen el “quickjump” de 20 metros: un salto al vacío parecido al bungee, pero que funciona como un resorte y es controlado por corriente magnética.

Y si tu  experiencia de la zona es a un plazo más largo, uno de los hoteles más espectaculares de la zona es Encuentro Guadalupe, con vinícola propia. Sus lofts de madera están inmersos en la naturaleza y tienen una pequeña terraza para ver los viñedos.

 

Sencillez de la langosta porteña
La langosta de Puerto nuevo no era pretenciosa, fue creada con la sencillez de los ingredientes que estaban a mano.